Descripción
Las típicas casas vascas ("Etxea" o "Baserri" cuando está en una finca) tienen una base de piedra.
Están pintadas de blanco con troncos de madera cruzados. Al color rojo inicial se unirá posteriormente el azul y el verde.
Antiguamente eran pintadas con sangre del ganado para proteger la madera de las inclemencias del tiempo.
Estas casas dominan el paisaje a lo largo del Golfo de Vizcaya, en el suroeste de Francia y el extremo norte de España (Pais Vasco y Navarra).
La importancia de la casa vasca llega incluso a reflejar el tipo de casa familiar en los apellidos de muchos vascos. Ejemplo de ello son los apellidos Etxeberri (casa nueva) y Etxeandi (casa grande).
La casa vasca albergaba a la familia, los animales y los apeos de labranza.
Muchas tienen un techo asimétrico que refleja la añadidura de más habitaciones a medida que crecia la familia.
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